Especificaciones del Producto:
Un tributo a la belleza de la calma al final de los días.
Técnica: Pintura al óleo sobre lienzo.
Medidas: 10,1 x 10,1 cm (pintura), 12,2 x 12,2 x 2,3cm (enmarcado).
Enmarcado: Caja americana en madera teñida de color nogal. Enmarcado artesanal.
Detalles: Obra original, perfecta para pequeños rincones que necesitan
alma.
El cielo abriéndose
Quiero ser viento que mece las nubes
El mundo me parece menos terrible cuando me siento a pintar. Observo con detenimiento como puedo mostrar a los demás lo que ven mis ojos. Elijo con la punta de mi pincel el lugar en el que detener la mirada del espectador, esta es una invitación a mirar el mundo a través de los míos. Cuando observes este paisaje puedes verme mirar, yo lo estaré haciendo a través de tus ojos.
Este cuadro es un rincón donde la humildad de la tierra se funde con la inmensidad del cielo. Los tonos verdes se extienden como un abrazo al interior de las nubes. Los tonos malvas prometen un atardecer. Los árboles, oscuros y densos, protegen la tierra. Está soplando el viento, lo escucho en la hierba. No tengo miedo si así suena el fin.